En España la población está altamente sensibilizada ante las noticias de desastres naturales en países del sur, la población responde a las llamadas por parte de las ongd u organizaciones sociales de manera inmediata, superando en ayuda incluso a países con renta per capita muy superior. De un día para otro, la “desgracia” deja de ser noticia, y los medios de comunicación van en busca del siguiente terremoto, inundación o catástrofe natural. Sin embargo, después de la noticia, la realidad persiste en los países afectados, y la población comienza el trabajo de rehabilitación de sus infraestructuras económicas y sociales.
Un claro ejemplo de ello es el tsunami que asoló las costas del sudeste asiático a finales del año 2.004. Millones de personas en todo el mundo, sensibilizadas por las imágenes que veían,volvieron a marcar un record histórico en las donaciones; la respuesta en este sentido fue incluso mayor que la ocasionada por las consecuencias del Huracán Mitch en Centroamérica. Sin embargo, poco más de dos años después, esa catástrofe fue sustituida por muchas otras y no se sabe nada de los esfuerzos de las víctimas en los procesos de reconstrucción.
El presente proyecto quiere partir de un caso concreto, un