El proyecto se articula tras el postconflicto armado en Colombia. En particular, el departamento del Chocó presenta una incidencia de pobreza del 58,7% respecto al 26,9% a nivel nacionalldándose el fenómeno de feminización de la pobreza, especialmente acuciante en el caso de mujeres indígenas, afrodescendientes y campesinas mestizas (colectivo meta el proyecto).
Siendo la mujer un factor clave para el sostenimiento de la economía familiar se presenta este proyecto, que tiene por objetivo el fortalecimiento de la mujer indígena, campesina mestiza y afrodescendiente del Bajo Atrato Chocoano a través de iniciativas socioculturales y económicas que permitan su desarrollo en la sociedad y la ruptura de patrones que normalicen la violencia en las relaciones humanas tras el postconflicto armado. Las acciones están encaminadas a que permitir el desarrollo de las mujeres en la sociedad y la ruptura de patrones que normalicen la violencia en las relaciones humanas tras el conflicto. Se incluye la realización de encuentros de participación con las beneficiarias, capacitaciones en materia de DD.HH y emprendimientos socioeconómicos, diálogo con actores del territorio claves en el reconocimiento de derechos de las mujeres, entre otros, con el fin de mejorar la protección de este colectivo, incrementar sus oportunidades de inclusión y desarrollo socioeconómico y mejorar su representatividad en los espacios públicos y privados.
El proyecto tiene como beneficiarias directas a 70 mujeres, incluyéndose a 50 hombres dentro de los beneficiarios indirectos del proyecto. En este sentido, el proyecto impactará de manera indirecta a un total de 300 mujeres de Riosucio y Carmen del Dairén. Además de ello, se pretende incidir en cerca de 100 autoridades indígenas y afrocolombianas que hacen parte de las organizaciones étnico-territoriales del territorio a fin de visibilizar la voz de los más vulnerables en el conflicto Colombiano.