Este proyecto pretende apoyar la formación y organización de jóvenes desplazados nicaragüenses en Costa Rica a través de talleres y organización comunitaria.
El trabajo con los desplazados nicaragüenses tiene lugar en el distrito Los Guido, en el cantón nº 3 llamado Desamparados, en la provincia San José, Costa Rica.
Los inmigrantes Nicaragüenses residentes en Costa Rica presentan características socioeconómicas muy en desventaja con respecto a los costarricenses:
• menor escolaridad
• ocupaciones menos cualificadas
• mayor pobreza
• menor seguridad social
• concentración en pocas comunidades
• malas condiciones de vivienda y servicios.
Costa Rica cuenta con una importante experiencia en materia de inmigraciones, principalmente aquella originaria de Nicaragua, la cual ha sido muy importante desde la década de los años 90 del siglo pasado. De hecho, Costa Rica ha recibido durante las últimas décadas una significativa cantidad de inmigrantes, de los cuales un 77% proviene de Nicaragua que huían de la situación de crisis del país arrasado tras los años de la guerra.
Los Misioneros Claretianos de Costa Rica con los que trabaja Fundación PROCLADE en terreno, apoyan estos proyectos y viven entre los desplazados emigrantes nicaragüense.
Los emigrantes desplazados encuentran imposible el poder financiarse sus viviendas y acciones sociales debido a que deben enviar parte de sus ganancias a sus países de origen para ayudar a los familiares que aún residen allí y a que sus salarios son bastante bajos o no reconocidos.
El objeto de este proyecto es contribuir a que los jóvenes y especialmente mujeres puedan formarse-capacitarse en distintas materias y puedan labrarse un porvenir. Que logren una total integración en la sociedad costarricense como vienen luchando poco a poco.
Por todo ello, el proyecto pretende continuar la labor iniciada hace años de favorecer las necesidades habitacionales y de convivencia de los emigrantes desplazados nicaragüenses, habitantes de comunidades muy vulnerables, que no cuentan con las condiciones económicas necesarias para poder acceder a una formación ni recursos dignos.
Se trabajarán en los talleres con jóvenes y adultos, y especialmente mujeres, temas diversos de autoestima, valores, evitar el conflicto y construir la paz. Asimismo, tratarán temas de administración y contabilidad y microempresas para que puedan emprender actividades mercantiles sencillas y sepan manejar los recursos y cumplir con sus obligaciones legales.