Desde hace ya tres meses, Nicaragua vive una situación social y política más que complicada. Han sido semanas de violencia intensa desde que los ciudadanos salieran a las calles para protestar en contra de una reforma de la Seguridad Social por decreto del régimen de Daniel Ortega. desde entonces, las manifestaciones y la dura represión recogen ya un bañance de más de 350 muertos. Una situación de la que ya alertaban hace meses desde la Coordinadora de ONG para el Desarrollo de España, desde donde se exigía al Gobierno el cese de la represión y el respeto a los derechos humanos. Por su parte, la Iglesia Católica, que ya ha denunciado que ‘hoy como nunca, los derechos humanos están siendo violentados en Nicaragua’, ha tratado de mediar en un diálogo para una salida pacífica.
Así, desde la Conferencia Episcopal nicaragüense, los obispos del país hacen un llamado ‘a los hombres y mujeres de buena voluntad a no responder con violencia a las diversas provocaciones de las que están siendo objeto’ y recuerdan que ‘la paz es un buen preciado pero precario que debemos cuidar‘. Éste es el comunicado completo que han lanzado